Facilita la independencia, no la acción en sí

Para las necesidades básicas de higiene podemos allanar las dificultades y facilitar en la medida todo lo posible para la independencia de las personas, y para que se puedan valer por sí mismas.

Es el caso de las necesidades de WC, habiendo personas que tienen dificultades para sentarse sin un asiento elevado que les permita acceder sin tener que agacharse como siempre lo habían hecho.

También es un esfuerzo grande la limpieza de las partes más íntimas o el levantarse del inodoro una vez acabado. Por ello una solución formidable es ayudarse con un simple asiento elevador.

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Simplemente se coloca sobre el váter, dado que la mayoría de elevadores vienen preparados para acoplarse de forma estándar. Los hay que vienen con huecos adicionales para acceso más cómodo en la limpieza, los hay con reposabrazos para levantarse y sentarse con apoyo seguro (también hay accesorios).

Pero todos los elevadores que les proponemos son robustos y diseñados de forma ergonómica para que su instalación, uso y limpieza sea apta para realizarse de forma continuada y con todas las garantías.

Debemos ayudar a las personas ancianas o con dificultades a poder desempeñar sus necesidades higiénicas de forma independiente, si es posible. Porque de hacérselo todo nosotros, les des-estimulamos, ayudándoles a perder facultades cognitivas, de práctica y habilidades de superación y de memoria.